Quetzalcóatl, también conocido por los mexicas como “La Serpiente Emplumada”, fue uno de los dioses mitológicos más importantes de la época prehispánica. Le rendían culto los mexicas, toltecas, olmecas, teotihuacanos y era llamado Kukulcán por los mayas. Este dios es una combinación entre una serpiente y un ave con muchas plumas. Se dice que su figura representaba el estado físico del hombre, el cual es la parte de la serpiente y su parte espiritual representada por las plumas. Por algunos era considerado la máxima deidad, ya que era el Dios de la vida, la fertilidad, la civilización, de la luz y en muchas ocasiones también era llamado el señor del viento y regidor del oeste, ya que según la leyenda azteca, fue Quetzalcóatl el dios que los llevó a asentarse en el lugar que convirtieron en Tenochtitlán.