Todo sobre Tenochtitlán, la capital del Imperio Azteca

El asentamiento en Tenochtitlán

Tenochtitlán era una cuenca realmente extensa rodeada de varios lagos y tierras perfectas para la agricultura. Pero, al contrario de lo que muchas personas piensan, la migración de la tribu proveniente de Aztlán no fue la primera en llegar allí, ese lugar ya era habitado por una población. Los aztecas se ubicaron en un islote del lago Texcoco bajo la promesa de darle aportes a los tepanecas, quienes ya habitaban en ese lugar y eran los dueños de la ciudad de Azcapotzalco. La alianza entre estas dos tribus se rompió un siglo después, pues en 1428, un grupo de aztecas liderados por Itzcóatl se rebelaron en contra de los tepanecas. Los aztecas eran un pueblo dedicado a la agricultura, pero sobre todo a la guerra, por lo cual derrotaron a los tepanecas y desde ese momento se dio pie para el surgimiento de lo que sería el Imperio Azteca.

¿Cómo era el Imperio Azteca?

El lugar fue dividido en cuatro secciones que se conectaban entre si a través de puentes y, como estamos hablando de un sitio rodeado de lagos, cada sección se conectaba con tierra firme para poder conectar con el comercio de otros lugares. Los nombres de cada sección eran: Moyotlan, Teopan, Atzacoalco y Cuerpopan. Con el tiempo, el lugar continuó creciendo y se edificaron los respectivos templos a los dioses, siendo el templo a Huitzilopochtli el templo mayor. Durante esa época se creó lo que se conocía como la Triple Alianza, que consistía en una alianza entre Texcoco, Tlacopan y Tenochtitlán, sin embargo, Tenochtitlán fue la ciudad que logró destacar por encima de las otras, por lo cual fue considerada la capital y el lugar desde el cual se gobernaba la Triple Alianza. La tecnología con la que contaban era una de las más avanzadas de la época, teniendo acueductos, palacios, puentes, pirámides, herramientas para agricultura y muchísimo más, por lo cual era la ciudad más avanzada que tenía la capacidad de gobernar a millones de súbditos.