Aspecto del ajolote mexicano
El ajolote tiene un parecido a un renacuajo con patas y cola, suelen ser de color negro o moteados y no poseen parpados. Puede crecer hasta 25 centímetros, su cuerpo es gelatinosa y viscoso, normalmente posee una cabeza redondeada y sus branquias están por fuera, al contrario de muchos anfibios, además pose tres pares de branquias. Una de las más grandes peculiaridades del ajolote es que los especímenes que vemos en cautiverio, son de color blanco con branquias rojas, sin embargo, en estado salvaje, sería casi imposible poseer este color, ya que sería una presa fácil para sus depredadores naturales. De hecho, los ajolotes blancos poseen condiciones como el leucismo o el albinismo, los cuales los hace cambiar de pigmentación, estos son descendientes de un espécimen blanco llevado a Francia en el siglo XIX para su reproducción.